Cada bebé es distinto, pero entre los nueve y doce meses, es impresionante cómo tu hijo/hija cada vez desarrolla más su independencia. Quizás lo más notable es cómo empieza a responder a su nombre, o cuando empieza a decir “mamá” y “papa”.
A los diez meses, comienza a asustarse de cosas que antes no le molestaban. Por ejemplo, cuando escucha sonidos fuertes. También es normal que demuestre malestar cuando intentas ponerlo en su silla para el automóvil, ya que siente que le estás restringiendo su movilidad.
De a poco, se prepara para caminar. Ya para cuando tiene once meses, tu hijo/hija se puede sostener de pie a veces sin siquiera necesitar apoyarse en una mesa o una silla. Además, empieza a balbucear frases, aunque probablemente no le entiendas lo que dice.
Para cuando ya cumple su primer año, tu bebé parecerá tener una energía inagotable. Sin embargo, también aumenta su capacidad de concentración, por lo que es bueno realizar actividades tranquilas, como dibujar o leerle un libro de cuentos. Cada logro, apláudeselo, porque no hay nada más importante para tu hija/hijo que sentirse estimulado.
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